Magnesio
¿Por qué es importante el magnesio?
El magnesio es un mineral imprescindible para la nutrición humana ya que es participe de cientos de procesos fisiológicos. Hay que tener en cuenta que los niveles bajos de magnesio no suelen causar síntomas, sin embargo, los niveles bajos constantes en un periodo mayor a 6 meses, pueden aumentar el riesgo de padecer problemas en la presión arterial, enfermedades cardíacas, diabetes tipo 2 y osteoporosis.
El magnesio regula la función de los músculos y el sistema nervioso, además de nivelar los niveles de azúcar en sangre y la presión arterial. Es recomendable en deportistas debido a que ayuda a formar proteína, masa ósea y ADN.
La cantidad de magnesio diaria que se requiere, no está como tal establecida ya que dependerá principalmente de la edad y el sexo de la persona. En ese sentido, las necesidades de este mineral se verán aumentadas principalmente en los hombres mayores y las mujeres embarazadas.
Los deportistas y las personas de edad avanzada son dos de los grupos poblacionales con mayor incidencia de falta de magnesio, pero también las enfermedades gastrointestinales y la diabetes tipo 2 son patologías que generalmente provocan un déficit de este nutriente.
Aquí te dejamos 15 de las funciones y propiedades principales de este mineral.
- Magnesio para los huesos.
A menudo se emplea el magnesio para el dolor de huesos o cuando se tiene desgaste e inflamación de las estructuras óseas. Es por eso que algunos estudios apuntan a que puede ser benéfico para tratar la artrosis. También, al generar una mayor densidad ósea, reduce el riesgo de fracturas y osteoporosis. - Magnesio para los dientes.
El magnesio, en conjunto con el Calcio están estrechamente vinculados en su formación. En ese sentido, se sabe que este nutriente contribuye en gran cantidad al mantenimiento de la dentadura en condiciones sanas. - Magnesio para el cerebro.
Es un mineral importante para para poder llevar a cabo los procesos generales cognitivos. - Magnesio para dormir.
Ayuda a conseguir un descanso profundo y reparador. Debido a que contribuye al funcionamiento del sistema nervioso activando los mecanismos para calmar y relajar el cuerpo y la mente. - Magnesio para la depresión y la ansiedad.
Investigaciones científicas sugieren que genera estímulos en los neurotransmisores que inducen la calma y la relajación.
Además, padecer ansiedad, depresión y confusión mental pueden ser síntomas mismos de la falta de magnesio. A su vez el consumo de este en conjunto con tratamientos antidepresivos convencionales puede potencializar su efecto y mostrar una mejora mayor y más notable. - Magnesio para el rendimiento deportivo. El magnesio contribuye al funcionamiento de los músculos, disminuyendo la fatiga, además de aportar en la producción de proteínas, elemento imprescindible para la formación y el mantenimiento de la masa muscular.
- Magnesio para las defensas.
Contribuye a mantener un sistema inmunitario saludable ya que favorece en el normal funcionamiento del sistema inmune y la protección de las células frente al daño oxidativo. - Magnesio para el estreñimiento.
Favorece el paso de las heces a través de los intestinos ya que puede tener un ligero efecto laxante. También se usa en ambiente médico para promover la evacuación de la materia fecal antes de ciertos procedimientos médicos. - Magnesio para la digestión.
Otra de sus funciones es neutralizar los ácidos del estómago, por lo que reduce los síntomas de acidez e indigestión. - Magnesio para la resistencia a la insulina.
Ayuda en el proceso mediante el cual las células convierten los nutrientes en energía. Un consumo amplio de magnesio aumenta la sensibilidad a la insulina, que hace referencia a la capacidad muscular y de las células del hígado para absorber adecuadamente el azúcar del torrente sanguíneo, por tanto, quienes padecen de resistencia a la insulina generalmente sufren de una pérdida importante de este mineral, dando como resultado ciertos beneficios en las personas con diabetes tipo 2, así como en su prevención. - Magnesio para la presión arterial alta.
Diferentes estudios muestran que puede reducir la presión arterial, por lo que su consumo tendría un efecto benéfico en la salud cardiovascular. - Magnesio como antiinflamatorio.
Ayuda a prevenir la inflamación crónica, que es un factor determinante para el envejecimiento prematuro, además de otros problemas tales como la obesidad, entre otros. - Magnesio para el síndrome premenstrual.
Es un importante auxiliar en el balance del estado de ánimo, la retención de líquidos y otros síntomas del síndrome premenstrual. - Magnesio para la piel.
Es un mineral importante y en ocasiones necesario para mantener una buena salud cutánea, así como para combatir la sequedad de esta. En conjunto con el colágeno y el ácido hialurónico, desempeña un papel clave en el aspecto del cutis. - Magnesio para la próstata.
Estudios científicos han sugerido que unos niveles bajos de este mineral podrían predisponer a los problemas de próstata.
Contradicciones
Los efectos secundarios o contradictorios de una alta ingesta de magnesio no son muy comunes, ya que por lo general, en personas sanas, los riñones suelen eliminar el exceso de este mineral a través de la orina. Sin embargo, no se recomienda superar la dosis máxima recomendada.
Los suplementos de magnesio pueden interferir con algunos medicamentos o estar contraindicados en determinadas condiciones. Es por eso que se debe consultar siempre con un profesional de la salud sobre su consumo.